Mateo 18:21-35

De la manera que fuimos perdonados Dios espera que también nosotros perdonemos a quienes nos ofenden.

Le pregunto ¿lo han herido alguna vez? ¿Lo han maltratado? ¿Lo han tratado mal o inadecuadamente? ¿Ha sido rechazado? Hoy el Señor nos va a enseñar que hacer.

Cuando alguien nos hiere, reaccionamos como si ese individuo nos hubiera robado algo. Sentimos que nos debe algo. 

Sin embargo, Jesús nos dijo que deberíamos olvidar la mala acción, dejarla de lado. O sea que debíamos perdonar. El perdón tiene algunas realidades que nosotros deberíamos considerar.

¿Qué es el Perdón? significa tratar benévolamente (compasivamente), soltar, liberar, pasar por alto.

El perdón viene a ser, entonces, la fuerza poderosa que remueve el obstáculo espiritual que existe entre una persona y otra o con su Creador, haciendo posible que la criatura humana se reconcilie y restablezca su amistad con ellos. (Dios y los demás)

La idea básica del perdón, cuando se usa en relación con el pecado, es la de cancelar una deuda; quitar la barrera y efectuar la Reconciliación; erradicar el pecado. Sin el perdón, que sólo Dios puede conceder, el hombre está irremisiblemente condenado a la perdición eterna. Por eso, el mensaje del perdón es una maravillosa esperanza de vida.